«Ni Una Menos» en Caleta Olivia: Convocatoria masiva por Antonella Aybar y el fin de la violencia de género

Lunes, 02 Junio 2025  – El Gorosito se convirtió hoy, 3 de junio, en el epicentro de un clamor unánime por justicia para Antonella Aybar, la joven víctima de un femicidio que conmocionó a la comunidad local. La marcha, que se enmarcó en el décimo aniversario del movimiento «Ni Una Menos», reunió a cientos de personas decididas a exigir al Estado acciones concretas contra la violencia de género.

La jornada estuvo cargada de emoción, con la presencia destacada de la familia de Antonella. Mario Aybar, su padre, visiblemente conmovido, agradeció la masiva concurrencia y la organización de la marcha. «No tengo palabras de agradecimiento. Muchísimas gracias simplemente», expresó, en nombre de la madre de Antonella, Silvana, sus hermanos Florencia, Gabriel, Lucas, Martín, el pequeño Valentino y las compañeras de escuela de Antonella. La consigna clara resonaba en el ambiente: «Pedimos justicia por Antonella Aybar. La violencia hacia las mujeres es responsabilidad del Estado».

Uno de los momentos centrales de la jornada fue la lectura de un documento. «Hoy nos encontramos nuevamente en las calles porque hace exactamente 10 años dijimos por primera vez ni una menos. Y lamentablemente, después de una década seguimos contando víctimas», subrayando la persistencia de la violencia que exige que las mujeres puedan «vivir sin miedo».

El reciente femicidio de Antonella Aybar en Caleta Olivia fue enfáticamente señalado como no un hecho aislado, sino parte de una «cadena de responsabilidades que el Estado no está cortando». Se enfatizó que la violencia hacia las mujeres es responsabilidad del Estado por «no prevenir, por no proteger, por no llegar a tiempo».

El documento criticó la insuficiencia de las leyes si no van acompañadas de «políticas públicas concretas, recursos, acompañamiento real, justicia con perspectiva de género y presencia territorial».

Educación Sexual Integral: Una herramienta para la prevención

En este marco, una de las oradoras reafirmó la vital importancia de la Educación Sexual Integral (ESI). «La ESI no es ideología, es una herramienta pedagógica para el cuidado, el respeto, la prevención de abusos y violencias, la formación de vínculos sanos», sentenciaron. Subrayó que garantizar la ESI es una responsabilidad del Estado y un derecho de las infancias y adolescencias.

La jornada concluyó con un llamado a la unidad: «Hoy no es un día para dividir, sino para que nos unamos en lo que nos atraviesa a todas: el derecho a vivir». La marcha finalizó con la exigencia contundente al Estado de asumir su rol, garantizar la prevención, la protección y la justicia, para que se «escuche a tiempo, que se actúe a tiempo y que no haya más Antonellas». El grito de «Por Antonella, por todas, Ni Una Menos, justicia para todas» resonó como un eco de compromiso en la ciudad.