Se instaló el tercer sismógrafo en Santa Cruz
Este sismógrafo de banda ancha fue adquirido por el Gobierno de la Provincia de Santa Cruz, a través del Ministerio de Seguridad, y formará parte de la Red Nacional de Monitoreo Sísmico que mantiene y opera el INPRES.
En el marco del Convenio de Cooperación Recíproca entre el Instituto Nacional de Prevención Sísmica (INPRES) y el Ministerio de Seguridad de la Provincia de Santa Cruz, firmado el 21 de abril de 2021, se procedió a instalar la tercera estación sismológica con trasmisión en tiempo real, de la Provincia, denominada Nibepo Aike.
Cabe recordar que, tres días después del sismo del 13 de octubre del 2021 y por directiva de la Gobernadora Alicia Kirchner, el INPRES y la Subsecretaría de Protección Civil y Abordaje Integral de Emergencias y Catástrofes desplegaron las primeras dos estaciones sismológicas como una política pública de reducción de riesgos al servicio de todos los habitantes.
Además, ya está previsto la instalación de un cuarto sismógrafo, que estará ubicado en la zona de la cuenca carbonífera, y de otros tres de ENARSA, con lo cual serán siete las estaciones en tiempo real que estarán operativas, y proporcionarán datos valiosos para monitorear la actividad sísmica en la región, constituyendo una herramienta fundamental para la prevención y la seguridad.
En este marco, el Subsecretario de Protección Civil y Abordaje Integral de Emergencias y Catástrofes, Diego Farías precisó: “Es importante destacar y agradecer a todas las personas y organizaciones que han colaborado y trabajado para hacer posible la instalación de esta estación sismológica en la provincia. De igual modo, agradecer al propietario de la estancia, Adolfo Jasman, a la Administración de Parques Nacionales por autorizar su construcción, a bomberos de la Policía de Santa Cruz y a Bomberos Voluntarios por su fuerte compromiso con la seguridad y el bienestar de la población”.
Por último, Farías expresó: “Contar con estos instrumentos, nos permite conocer las características de este tipo de amenazas, trabajar con datos científico-técnico y establecer políticas de desarrollo sostenible que reduzcan la vulnerabilidad, evitando la nueva creación de escenarios de riesgos y creciendo con riesgos controlados”.